miércoles, 13 de marzo de 2013

El Sol ilumina a la Luna


Miraba al cielo y no lo encontraba
Era extraño, pues lo veía todas las mañanas
Y aunque no lo notaba,
Su calor me acariciaba

Le preguntaba ¿dónde estás amado mío?
Ya estoy acostumbrada a verte
Ven, que te necesito al  lado mío
Ven, que te necesito aquí, conmigo

Así, como la estrella más brillante
Que ilumina el día con su sola existencia
Así, como ella ilumina cada mañana
Ilumina Dios mi alma.

Que no se me queden las noches
Donde el Sol le da luz a la Luna
Pues ella no brillaría sin que el Sol la iluminase
Pareciera insignificante pero el Sol la hace brillante.

Aunque no lo veamos, Dios esta ahí, trabajando en nosotros. Que la luz de Cristo brille en nosotros.